
Es bastante común que el ser humano siempre busque lo que se le haga más fácil sin pensar bien en las consecuencias, y, si bien, los préstamos rápidos son algo que puede darle bastante facilidades a las personas, también tienen un montón de pautas que no se tienen en cuenta que pueden terminar trayendo más problemas que soluciones a la persona a acreditada. Por eso, vamos a repasar algunos peligros de los préstamos rápidos y cómo evitarlos:
Préstamos rápidos con altos intereses
Sin duda, el principal inconveniente que uno le puede ver a los préstamos rápidos son sus altísimas tasas de interés que pueden llegar hasta el 50% del monto dado por la entidad bancaria, cuando los tipos de intereses normales oscilan un 9%.
Desafortunadamente, no hay una acción directa que pueda hacerse para negociar o reducir estos intereses, la mejor opción sería mantener un buen historial crediticio para que el banco cobre cuotas bajas, aunque estas pueden seguir elevadas con un margen de un 30%.
Plazos de pago reducidos
Se podría pensar que por los altos intereses de los créditos rápidos se ofrecería más tiempo para pagarse, pero, este tipo de préstamo solicita la misma velocidad al recibir su devolución que al otorgar el préstamos, disponiendo de un rango menor a los 4 días para saldar la deuda.
Ante esto, la mejor opción sería trazar un plan efectivo antes de hacer la solicitud para evitar un endeudamiento. También, al momento de efectuar el contrato ofrezca buenas razones de porqué deben darle la mayor extensión de tiempo para pagar.
Penalizaciones
Como todos los adeudos, si el deudor no logra cumplir con los plazos de tiempo establecido, este tendrá que pagar una cuota adicional. Pues, en el caso de los créditos rápidos, esta penalización puede llegar a ser de un 50% de la deuda adicional, haciendo que, en el peor de los casos, termines pagando el doble de lo que pediste originalmente.
Si llegas a exceder el tiempo límite, no hay forma de justificarse ante la entidad bancaria para evitar su penalización, por lo que la única opción para evitar esta situación sería ser responsable y asegurarte de pagar si o si tu deuda antes de la fecha límite.
Préstamos rápidos con condiciones injustas en la letra pequeña
Podrías pensar que por venir de una entidad bancaria, los contratos de estos préstamos son muy transparentes, pero no podrías estar más equivocado. Este tipo de créditos son conocidos por ser bastante engañosos, teniendo un montón de cláusulas que podrían aumentar las tasas de pago o reducir tu tiempo de pago de forma inesperada por situaciones un tanto ridículas.
Por lo tanto, lo mejor es analizar detalladamente el contrato y los documentos que entreguen, y no dejarse llevar por la rapidez de los trámites que los bancos realizan en este tipo de crédito, y buscar la opinión de un experto de ser necesario para poder hablar de las situaciones que notes abusivo. Incluso podrías negociar otras condiciones del contrato que podrían ayudarte a saldar la deuda, aunque estos aspectos son casi imposible de cambiar.